Bueno, en estos momentos toda la
familia debe estar llegando a nuestra maravillosamente denominada tierra santa,
Chipiona. Pronto empezarán a llegar fotos y mensajes y yo a la espera de que
llegue mi momento.
Y como todo llega, hoy empieza el
mes donde puedo disfrutar de la siesta, de las tardes libres, de dejar pasar el
tiempo al fresco de una noche de verano.
He llegado con bastantes fuerzas
y eso me agrada bastante. Supongo que el estupendo mes de julio que he
disfrutado ha tenido que ver. El mar está en calma.
Ayer, en mi última tarde de
trabajo, tuve una de esas coincidencias mentales. Pensaba en qué
cambiar, y esa circunstancia me ayudó. Los que me quieren me lo dicen y los que
cobran más. Baja el ritmo, May. En ese momento la radio hablaba de “no podemos
permitirnos ir tan rápido, cambia la palabra FAST (rápido) por SLOW (despacio)”.
No será fácil verdad, los
biorritmos están ahí, pero será interesante eso de buscar restaurantes de
“comida lenta”, hacer “deporte-lento”,
disfrutar de “sexo-lento”, saborear un libro lentamente, mirar despacio,
hablar pausado, PENSAR…
Creí haber encontrado la esencia…
y me quedé dormido.
Buen verano a todos y a todas.
Somos tan iguales que al final todo@s
buscamos lo mismo. ¿Dónde habéis puesto la “Sinquepil”? (May Sanz, verano 2013)
2 comentarios:
Hay algo asociado a la lentitud, que segura harás de puta madre: la reflexion (mental, claro, la sexual es re-flexión, si se puede...).
Un saludo.
Te flexión aremos amigo Celósime. Me gusta verte por mi cibercasa. Yo la tuya la visito muy frecuentemente aún sin dejar comentario alguno. Siempre presente. Un abrazo fuerte y espero que físi-labo vaya mucho mejor.
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